Stoller Paraguay

En la cosecha de 1999, el rendimiento medio por hectárea fue de 2.292 kg. Sin embargo, en el transcurso de dos décadas, estos niveles de rendimiento han aumentado en un 100%, alcanzando una media aproximada de 5.500 kg por hectárea. Este notable aumento de la productividad representa una transformación significativa de la producción de maíz en Paraguay.

Según la Bolsa de Comercio de Rosario (2019), Paraguay ha experimentado un aumento significativo en su productividad de maíz en las últimas dos décadas, impulsado por la adopción de variedades transgénicas. Esta adopción ha jugado un papel importante en el aumento de la capacidad productiva de este cultivo en el país.

En un período de 20 años, el país ha pasado de producir 656.000 toneladas en 332.000 hectáreas en 1999 a una producción estimada de 5 millones de toneladas en 885.000 hectáreas en 2019.

Ilustracíon 1. Evolución del cultivo del maíz en Paraguay.

Evolución del cultivo del maíz en Paraguay

Fuente: Bolsa de Comercio de Rosario (2019)

Según datos de Capeco (Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas, 2023), para la cosecha 2022/23 el área sembrada de maíz en Paraguay alcanzó las 850.000 hectáreas. La producción total de maíz en esta campaña fue de 5 millones de toneladas, con un rendimiento promedio de 5.882 Kg por hectárea.

Por sus características fisiológicas, el cultivo de maíz presenta un alto potencial productivo. Miranda et al. (2021), destacan que el nivel productivo actual del cultivo de maíz fue posible gracias a la adopción de nuevas tecnologías y prácticas agrícolas.

Para asegurar la expresión del potencial productivo del maíz, es esencial comprender el momento en que se definen los componentes de rendimiento, así como los factores que pueden interferir, lo que permite planificar prácticas de manejo que tengan como objetivo proporcionar a las plantas condiciones adecuadas para su desarrollo.

Tabla 1. Períodos de definición de los componentes de la producción de maíz.

Períodos de definición de los componentes de la producción de maíz
¹ El potencial de masa de granos se define cuando la división ocurre en el endosperma, 7 a 10 días después de la polinización (R1-R2 o «fase de latencia» de la curva de crecimiento sigmoidea de granos). ² R1 = Potencial de óvulos o potencial del número de granos, si no hay estrés afectando la polinización o la fase de desarrollo final de granos. ³ Fábrica = Después del inicio de la floración en V5, todas las partes de la planta de maíz ya están desarrolladas para soportar la mazorca y el desarrollo de granos.

Variables interfieren en el rendimiento del maíz

Densidad de siembra

Una de las variables que puede interferir en el rendimiento del maíz es la densidad de siembra, también conocida como rodal, que es definida por Cruz et al. (2010), como el número de plantas por unidad de área. La densidad de siembra está directamente relacionada con el rendimiento del maíz, ya que una pequeña variación en la densidad tiene una gran influencia en el rendimiento final del cultivo.

La densidad poblacional ideal para lograr maximizar el rendimiento del grano de maíz varía entre 30,000 y 90,000 plantas ha-1, sin embargo, su determinación depende de varios factores como la disponibilidad de agua, la fertilidad del suelo, el ciclo del cultivar, el tiempo de siembra y el espaciamiento entre las líneas de cultivo.

Disponibilidad de agua

La disponibilidad de agua se destaca como el factor que más a menudo limita el logro de un alto rendimiento de grano.  Los altos rendimientos de los granos de maíz resultan del éxito en el uso de factores ambientales con la máxima eficiencia, minimizando las causas adversas para su desarrollo (Bredemeier, 2020).

A lo largo del desarrollo del cultivo, existen diferentes requerimientos ambientales y climáticos, además de estos requerimientos, la nutrición es otro factor fundamental, cumplir con los requerimientos nutricionales de la planta es sumamente importante para que la planta pueda crecer y desarrollarse con el fin de expresar su potencial productivo, así, al conocer sus demandas y la fenología de la planta es posible planificar un manejo adecuado tanto de la fertilización como de otras prácticas de manejo.

Fertilidad del Suelo

El cultivo de maíz es muy exigente en la fertilidad del suelo, Eicholz & Aires (2020), afirman que el maíz responde progresivamente a niveles crecientes de fertilización, siempre que los demás factores estén en niveles óptimos, siendo el nitrógeno (N) el nutriente al que presenta la mayor respuesta al aumento del rendimiento del grano.

Cuando sea necesario proporcionar dosis altas de N, parte se puede proporcionar en base a siembra y el resto en cobertura, y se debe realizar fraccionamiento de dosis, aplicando 50% en etapas fenológicas V4 a V6 y el 50% restante en etapas V8 a V9 (Spagnollo & Scivittaro, 2020).

Cómo estimar la productividad del maíz?

Es posible estimar la productividad de un cultivo, incluso antes de la cosecha, por medio de muestras. Para esto, se debe observar y elegir una zona representativa del cultivo, para que la estimación sea lo más precisa posible. Hay dos métodos para estimar el rendimiento del maíz, como podemos observar abajo.

Aunque la naturaleza ejerce una influencia significativa en el desarrollo y rendimiento del cultivo, es posible optimizar estos factores a través de la adopción de estrategias de manejo adecuadas, como: la correcta elección del cultivar, el manejo de la fertilización proporcionando un buen aporte nutricional a las plantas, la determinación de la densidad de plantas, así como la temporada de siembra además del manejo fitosanitario y otros manejos necesarios durante el desarrollo del cultivo.

Estas prácticas crean un ambiente propicio para el crecimiento y desarrollo del cultivo, por lo que es esencial comprender la importancia de estas prácticas en el momento adecuado para garantizar buenos rendimientos.